martes, 15 de febrero de 2011

La vida hay que vivirla con tijeras

El grafito tiene exactamente los mismos átomos que el diamante.
Por eso escribo a lápiz.
Por eso aprieto el lápiz haciendo fosos a mi castillo,
para darle vivienda digna a un puñado de cocodrilos
y trabajo a caballeros que manejan catapultas.
Mi recuerdo tiene la consistencia de una tiza rota.
Relleno cuadernos como vacío un corazón.
Estoy cosiendo un cuerpo lleno de nube,
de esa nube que llevamos pegada a la boca,
en invierno.
Llevo unas tijeras para cortar el aire
y hacerme paso
porque yo ya no soy un obstáculo.
Hoy no hay presidente que corte la cinta.
Está sentado en su despacho para la foto.
Alegremente paseo las huellas de todos los crímenes
contra ti contra mí contra todas las capitales.
Cuando nací ya estaba el mundo partido con regla.
Aprendíamos países, ríos, penínsulas...
Ortografía arbitraria como los nombres.
Reconquistas y glorias en la escala de los hombres.
Hoy decido cómo se llaman las cosas inmediatas.
Decido el límite de la frontera que todo lo funde.
No quiero jugar a las piedras, la tiza, las piedras,
el salto, y las piedras.
Porque si salto no toco suelo
y volar es otra cosa.

lunes, 14 de febrero de 2011

Tú eres responsable de todo lo que destruyes

He sido novia del desaliento,
de las hostias a destiempo.
Enamoré a mi piel antes de mudarme de un hombre entero.
Cuando te conocí aún tenías cuerpo.
Entendías la ilusión como motor de vida.
Enamoré a mis oídos de tu voz
y conocerte se hizo hecho.
Dejé mi pensamiento, mi tiempo,
perdí el "mí", el "yo",
en un querer salvar, querer esperar
ese instante potencial perfecto
tras un muro circunstancia.
Sin pértiga soy la puta reina del guetto.
Si salto estoy atrapada en un juego de oca.
He visto la película de mi suicidio
en loop continuo de ventana, vuelo y golpe.
No voy a caer por el dolor,
aplastar a transeúntes en la parada del bus.
No voy a caer por el dolor
del empuje de un niño
atascado en su sofá de terciopelo fácil.
Me echaste de todas las vidas,
me eché de mi casa, de tu casa
y volví a saludarte,
porque mi mala memoria
se confunde con eso tan bonito de perdonar.

martes, 8 de febrero de 2011

Conversaciones con Anónima

- Me recuerda a la canción esa, de Con las manos en la masa.
- Es de Vainica Doble.
- Y María de Medeiros no habla de ese grupo en la película de "Mi vida sin mí"?
- No. Es en inglés y es en Canadá.
- Pero es de la Coixet.
¿No dice que le gusta ese grupo de Vainica Doble?
-Yo creo que dice que le gusta Mili Vanili.
-¿Y no es lo mismo? Pero en inglés.

Confieso que he matado burros con escopeta de perdigones.

Ha surgido un país de muerto de piscina.
Es un hombre contento.
"Que luego flotas, que luego flotas",
gritó una señora desde la orilla.
Y todo se hizo montaña.
Cambiamos de lugar
porque el mundo estaba dentro de nuestras cabezas.
Elegimos silencio
y escribimos palabras de sal de piedra.
Agotamos la sal
para que no existiera la sed,
ni pudiera vengarse.
Y seguimos siendo,
hambrientos.
Nos comimos a los hombres
sin sal,
para que no existiera el hambre.
Mirábamos atrás a cada paso.
Todo era estatua
y nos pareció la misma mierda plástica de siempre.
Derribamos la estatua
para que no existiera el arte
y pudiéramos así pensar
en el Big Bang
que surge de la pistola de un niño.