domingo, 30 de agosto de 2009

...

Hoy no hablo, escupo
"malorientadamente" hacia el cielo,
en los agujeros azules de las nubes.
Y me escupo a mí.
Física elemental
de intercambio de líquidos,
como los besos
que doy ligera ligera
a ver si va a quedar algo de mí en otro.

...

Hoy he escrito para borrarme
y despertar mañana
con otro personaje a la medida de tus besos.

...

Desgarrar a cucharadas palabras de otros
y no tener nada que decirse.
Usar lo que te dicen,
arrancar la fibra a los abrazos,
caer flojo.
No tener más músculos
que los que sostienen una respiración básica,
la de un suspiro
o un orgasmo imitado,
nunca el propio.
No sabemos nosotras
el efecto de los hombres que arrastramos
colgando más que dos tetas.
Balancean los hilos del tiempo
metiéndose en los motivos que más importan,
en lo inmediatamente urgente,
en lo inmediatamente amado hoy.
Da más miedo que un fantasma,
o un cuello en hora de Drácula
la misma que de olvidar zapatos,
y tener que dandar a cojas.

...

No me preguntes nunca
para qué soy.

Los mapas no nos convencen.

Los hules de las casas tienen mapas de un país recortable.
Paramos los sitios,
pero la gente se escapa.

...

A veces las mujeres tararean
como si cantaran melodías multinacionales.
Se habla poquísimas lenguas,
casi ninguna,
en el mundo de escuchar,
y se escucha siempre,
uno a uno.

...

Algunos escriben.
Algunos leen.
Otros disimulan.

...

Llevo todo el día empezando y acabando palabras
sin decirte.

lunes, 24 de agosto de 2009

...

En las casas, como en el mundo...
no son los cuadros lo que está torcido, son las paredes.

viernes, 21 de agosto de 2009

Ocupaciones.

Cansinamente fui a buscar una manzana. Una manzana. Redonda. Fulgurante.
Qué placer secreto sopesarla apoyado en la puerta de la nevera.
¿Y usted a qué se dedica? Yo hago manzanas.
Por fin una ocupación elemental, limpia de dobleces éticas, de sueños mutilados, de tonterías.
(La escala de los mapas, Belén Gopegui)

El ánimo.

Unas veces nos tendemos al sol
y otras nos doblamos y nos metemos en cajones.